Participantes en el espacio “Dialogar, dialogar”, realizado este 22 de enero en el Salón de Mayo, del Pabellón Cuba, resaltaron la importancia de conocer la vida y la obra del Héroe Nacional José Martí, pero especialmente de sentirlo como parte de cada uno de nosotros.
Pedro Pablo Rodríguez, Premio Nacional de Ciencias Sociales y Humanísticas, expresó que Martí es vital, no solo por lo que dijo, sino por lo que hizo a favor de todos, por su ejemplo como revolucionario y hombre amante de su país, con una profunda vocación de servir.
Mediante varias anécdotas reafirmó la trascendencia del Apóstol como patriota y pensador que transmite una ética, una pretensión de ayudar siempre y contribuir al bienestar de los pueblos, por lo cual su obra ha sido traducida a múltiples idiomas. “En países, como Nigeria y la India, reconocen sus valores y lo admiran. ¿Cómo es posible entonces que algunos en Cuba, su tierra natal, su Patria, sean capaces de irrespetarlo?”, dijo el también pedagogo.
Agregó que Martí nos debe motivar siempre a ser personas de nuestro tiempo, capaces de entender las dificultades actuales y realizar acciones para erradicarlas. “Él aprendió lo mejor de diferentes culturas, pero también supo identificar los peligros y rechazó rotundamente el colonialismo en todas sus expresiones”, refirió.
“Martí es fuente de valores e ideas, de una sabiduría, un respeto y una ética que ojalá todos tengamos, por eso siempre será muy útil para la formación de los individuos en la sociedad”, manifestó en el intercambio, en el cual predominaron los jóvenes.
Recordó que Martí organizó la Guerra de 1895, no solo para lograr la independencia de Cuba, sino por el bien mayor del hombre, como escribió en el Manifiesto de Montecristi.
Lil María Pichs Hernández, miembro de la dirección nacional del Movimiento Juvenil Martiano, dijo que resulta esencial estudiar el texto “Martí en la hora actual de Cuba”, escrito por Cintio Vitier en 1994, el cual posee total vigencia.
Desde el público, Luis Emilio Aybar, investigador del Centro Juan Marinello, precisó que también debemos tener en cuenta los aportes de Martí al pensamiento y la práctica política en el país. Destacó además su capacidad para ampliar los horizontes del pueblo cubano más allá de América Latina, gracias a su vocación integracionista e internacionalista, reflejada en frases como “Patria es humanidad”, la cual abarca esa disposición de colaborar más allá de lo físico, más allá de un territorio, un pedazo de geografía.
Yusuán Palacios, presidente nacional del Movimiento Juvenil Martiano, aseguró que Martí siempre nos hará falta, por eso debe estar en los corazones. “Ojalá que cada uno de nosotros sea verdaderamente martiano, lo cual implica una actitud, una pretensión de mejorar como seres humanos de manera permanente”, expresó.
“Martí no es la estatua, sino un hombre que ha transcendido y merece ser descubierto por cada generación desde el conocimiento y el amor. Nunca deberemos permitir ultrajes contra él, porque son también contra nosotros”, añadió el también diputado a la Asamblea Nacional del Poder Popular.
Otros participantes manifestaron que todos debemos contribuir a que el ejemplo de Martí se mantenga palpitante en todo momento, con una labor conjunta que integre a las escuelas, las familias, los medios de comunicación, el barrio…, la sociedad en general.
Realizado una vez cada mes, el “Dialogar, dialogar”, creado en el año 2013, se mantiene como una plataforma para el debate, la reflexión y la construcción colectiva, con el impulso de la Asociación Hermanos Saíz, organización que agrupa a jóvenes escritores, artistas e investigadores cubanos.
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