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lunes, 25 de noviembre de 2024

Año nuevo, pirámide nueva

Solemos preferir perder de la memoria las anécdotas adversas, pero por sus enseñanzas, esta debiera perdurar...

Félix Arturo Chang León
en Exclusivo 01/01/2021
2 comentarios
Cubahora foro Chang
La pirámide mantendrá la base en posición correcta, si logramos el nece-sario equilibrio financiero a nivel social y familiar. (Alfredo Lorenzo Martirena Hernández / Cubahora)

Este Primero de Enero, primer viernes del bienvenido 2021, El Foro comienza con el mismo tema con el cual concluyó el pandémico año anterior relacionado con la pirámide, y no precisamente como figura geométrica, sino relativo a un asunto social.

A partir de hoy comienza oficialmente un proceso para que cada cual ocupe su lugar en dependencia de lo que rinda en el trabajo y de su aporte a la sociedad, aunque previamente se dieron pasos que tal vez pasaron sin que todos nos diéramos cuenta como el caso del incremento salarial al sector presupuestado.

Quienes estuvieron en desventaja tienen recuerdos desagradables, sobre todo, cuando los compatriotas que disfrutaron la pirámide invertida llegaban a mostrar satisfacción por ganar más a pesar de realizar una de las faenas más sencillas.

Todos los años que ha durado la situación crearon malestar generalizado y mellaron el estímulo por el trabajo y el estudio, pero no olvidar debe contribuir a evitar que tropecemos otra vez con la misma pirámide y sus nefastas consecuencias hasta para la vida familiar y personal.

Podemos extraer enseñanzas del hombre al emigrar dejó su auto al hijo, a quien todavía está enviando puntualmente remesas mensuales que han permitido a sus familiares en Cuba disfrutar de un alto nivel de vida sin trabajar ni realizar ninguna otra actividad que reporte ingresos.

Aunque dejó un vehículo en buenas condiciones, ni siquiera se ha utilizado como medio para ejercer el cuentapropismo como transportista privado legalizado, y es empleado exclusivamente para pasear en viajes semanales de más de 600 kilómetros en ida y vuelta.

Al heredero se le han escuchado expresiones de que él no trabaja ni lo hará, pues mientras que los demás lo hacen, él aporta moneda libremente convertible, pues mientras más recibe, mayores son sus gastos y el país puede captar la necesaria divisa.

Emigrados o viajeros que permanecen más tiempo en el exterior que en Cuba, así como quienes se han jubilado en otros países, al retornar al país de origen de vacaciones o definitivamente, sostienen que con trabajar varios meses en el extranjero, pueden vivir cómoda y holgadamente en la Mayor de las Antillas.

Hay jóvenes que han estudiado para complacer a los padres, y otros que ni para eso, pero por el camino de las ilegalidades y el no cumplimiento de hábitos y costumbres de la sociedad, logran hacer dinero fácil que con la misma rapidez que adquieren, lo gastan sin haber producido nada.

No pocos padres han sufrido escuchar razonamientos de que pertenecen a una generación que se ha pasado la vida trabajando, sin poder conseguir lo que ellos, sin ser técnicos ni obreros calificados, logran en escasas horas sin ningún esfuerzo.

El anecdotario es extenso, como excesivamente prolongada ha sido la durísima vida de personas dedicadas al estudio y el trabajo mientras que a su alrededor quienes realizan una labor que apenas requiere escasamente saber leer y escribir, ganan un salario superior aunque realizan regular o mal su faena.

En este primer día del año 2021, El Foro les propone un brindis por un año de salarios y gastos equilibrados, por una pirámide al derecho.


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Félix Arturo Chang León

Periodista cubano de origen chino que nació y vive en Cuba. Santa Clara. Dirigió el periódico Vanguardia durante 16 años.

Se han publicado 2 comentarios


Paloma
 6/1/21 16:58

Saludos, estimado Chang, coincido en lo que expresa el  forista Subiaut cuando dice: "Los fenómenos sociales no siempre se comportan en la dirección y con el resultado que se espera, tras haber incidido sobre sus procesos." Por supuesto como diría una antigua compañera de trabajo: en la vida todo es circunstancial. No obstante considero que la alta dirección del país lo tiene en cuenta también; y es que en las circunstancias actuales no nos queda de otra. De ahí aquello de: CAMBIAR TODO LO QUE DEBA SER CAMBIADO, como parte del proceso revolucionario no puede ser de otra forma. Vivimos rodeados de un sin fiin de cosas contrarias aquello que deseamos lograr y si no metemos el pecho y echamos pa´lante no lo lograremos. Entonces se trata de no claudicar. El camino es largo y lleno de obstáculos (objetivos y sobre todo subjetivos); es desafiante el reto para lograr el cambio, pero no puede esperarse más, el tiempo perdido tambien hace más pesada la carga de las insatisfacciones que no son pocas. Para los de mi generación resulta una batalla más dentro de las tantas libradas pero para las nuevas generaciones es mucho más complejo comprender de qué lado van las cosas, sobre todo porque el entorno global no siempre es favorable para nuestros empeños. Como siempre !!!!SEGUIMOS EN COMBATE!!!!

Juan Carlos Subiaut Suárez
 1/1/21 13:33

Estimados todos:

Muchas felicidades por el año nuevo. Es loable el objetivo de enderezar la famosa pirámide social, que cada cual ocupe su lugar en dependencia de lo que rinda en el trabajo y de su aporte a la sociedad. Como comenta el artículo, la pirámide mantendrá la base en posición correcta, si logramos el necesario equilibrio financiero a nivel social y familiar. Pero no estoy convencido del resultado. Los fenómenos sociales no siempre se comportan en la dirección y con el resultado que se espera, tras haber incidido sobre sus procesos. En décadas hemos creado un gran segmento de población que no tiene que trabajar, que aportar, para recibir y mucho menos para sobrevivir. Quizás una parte se acerque a la búsqueda de trabajo, la mayoría se adaptará y creará nuevas formas para seguir viviendo de los que trabajan. Se han convencido, y mas en este tiempo de pandemia, que sin trabajar y aportar a la sociedad, pueden vivir de los que trabajan y aportan, por cualquier medio, lícito o ilícito, y que ello les conlleva apenas esfuerzo y, sobre todo tiempo, del que no disponen los otros. En los próximos meses veré, <ojalá>, si estoy equivocado.

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