Código de las Familias: después de la lucha hay que seguir luchando
Ninguna ley va a dar por ganada una lucha que es, al mismo tiempo, un poco —o bastante— contra nosotros mismos, contra la jodida ceguera de nuestros privilegios. Tan blancos algunos, tan machitos, tan de ciudad, tan de academia, tan monstruos también de cierta forma; tan como nos enseñaron...