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lunes, 25 de noviembre de 2024

Los desafíos de la industria turística en el 2021 (+Infografía)

El Ministerio de Turismo de Cuba ha concebido un programa para la reactivación de sus principales mercados emisores y ha diseñado, de conjunto con el Ministerio de Salud Pública, normas para la seguridad sanitaria...

Jose Valentín Rodríguez Pérez en Exclusivo 30/12/2020
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Aeropuertos-normas-seguridad sanitaria
Las autoridades de salud extreman las medidas de vigilancia epidemiológica y control sanitario internacional durante el arribo de pasajeros.

La Pandemia de la COVID-19 ha sumido a la humanidad en una angustiosa tragedia. La pérdida de vidas humanas, el colapso de muchos sistemas sanitarios, la ansiedad de la gente por lo que vendrá, la incertidumbre sobre la erradicación a corto plazo de esta trasmisión y, acto seguido, el impacto en la economía.

La industria turística no ha escapado a esta contracción que la ha estremecido de manera brutal.

Consultada la última edición del Barómetro OMT de la Organización Mundial del Turismo se advierte que “el turismo internacional puede haber caído al contabilizar el 2020 en cerca de un 70 por ciento en viajes internacionales. Ha sido la peor crisis a la que se ha enfrentado este sector desde que comenzaran los registros hace setenta años”.

Según reseña el propio análisis de la OMT, la disminución de los viajes en los 10 meses de este año fue de un 40 %, que significa unos 100 millones menos de turistas internacionales, lo que se traduce en 90 000 millones de USD en pérdidas por este concepto.

Frente a pronósticos y variables sobre una posible recuperación de la industria turística mundial, resulta muy difícil evaluar ahora un entorno favorable, pues el mundo se encuentra en estado de conmoción tras el tremendo impacto psicológico y sociológico del confinamiento, factores claves para predecir posibles escenarios futuros en los viajes.

El golpe al sector turístico cubano ha sido severo, por una parte  la existencia real de un bloqueo de los EE.UU. con medidas recrudecidas, que impiden en primer lugar que sus ciudadanos puedan viajar a la Mayor de las Antillas y que sus líneas aéreas y de cruceros realicen operaciones comerciales, junto a una feroz persecución de las transacciones financieras y, por el otro, la pandemia que ha congelado las emisiones de turistas al detenerse la industria sin chimeneas en todo el mundo.

El Ministerio de Turismo ha concebido un programa para la reactivación de sus principales mercados emisores y ha diseñado, de conjunto con el MINSAP, normas para la seguridad sanitaria, las que deben ser acreditadas en cada instalación hotelera con una certificación.

Estos meses de contracción del sector han servido para realizar mejoras en todas las instalaciones, inversiones postergadas y remodelaciones necesitarias para poner en mejores condiciones a toda la planta hotelera y se ha continuado la construcción de nuevos hoteles en La Habana, Varadero y Holguín, por citar esos polos.

El Ministerio del sector ha planteado frente a la contingencia incentivar el turismo nacional y proyectar acciones de emergencia para lograr acuerdos con turoperadores y líneas aéreas para alcanzar en el menor plazo posible los niveles del país antes de la pandemia. Una modalidad que ha comenzado a incrementarse son los canales de ventas online, donde los clientes pueden evaluar la oferta y las medidas de seguridad sanitaria que le trasmitan mayor confianza en la compra de las ofertas.

Un mercado tradicional como Canadá ha empezado a dar leves señales en su emisión hacia Cuba, a los que se suman Rusia y Alemania hacia destinos preferentes como los Cayos del norte del país.

Fuentes consultadas, consideran que “si bien puede verse la luz al final del túnel, una reactivación de la actividad turística en 2021 no llegará en Semana Santa, como algunos auguraban”. “No se darán cifras espectaculares”. Pronósticos más conservadores consideran que la recuperación del sector se iniciará cuando la mayor parte de la población de esos mercados de mayor emisión estén vacunadas.

El mundo ha cambiado como consecuencia de esta pandemia, que llegó de manera abrupta y ha afectado a todos los continentes. La economía mundial ha sufrido un brusco frenazo, y su vuelta a la normalidad será paulatina. Europa sufre este fin de año un nuevo confinamiento por la segunda ola de la COVID-19, lo que detiene cualquier decisión.

Sin dudas, se ha producido un cambio en los paradigmas de viajes, en que el mayor enemigo es la incertidumbre y para ello la trasmisión de un clima de confianza, seguridad y la promoción creativa que legitime la utilidad social de los viajes serán las mejores herramientas para motivar a los mercados emisores a viajar a Cuba.


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Jose Valentín Rodríguez Pérez

Periodista y analista político

Se han publicado 1 comentarios


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 7/1/21 16:10

Por que ese tratamiento diferenciado para turistas, si son viajeros internacionales también , vienen infectados y aunque vayan para hoteles , una gran cantidad van para casas particulares y mantienen contacto directo con toda la población,el uso del nasobuco no es obligatorio para estos ,creo que este tratamiento diferenciado de solo 1pcr al turista y no ejecutarle otra al 5to dia es un boumerang que puede crear una situación complicada en territorios que poseen una gran cantidad de hostales particulares y restaurantes , pienso que se debe analizar este tema, no veo ninguna diferencia para establecer este protocolo, a no ser que se utilice como gancho comercial, que no es el momento, pues existe el riesgo de contagio y transmisión de la enfermedad

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