India se reposiciona en el mundo al timón del G-20

El Grupo de los 20, o G-20, es la versión más reciente y numerosa de un foro que inicialmente junta a solo siete países, las economías de mercado más industrializadas en 1973. Fundado por iniciativa del entonces secretario del Tesoro estadounidense, George Schultz, el septeto agrupaba a las naciones anglosajonas de América del Norte, los pesos pesados de Europa y a Japón.

Para 1999, una coordinación financiera global requería una mesa más grande y se sumaron otros nombres de importancia, como Argentina, Brasil, China o la India. Si el Grupo de los 7 se centraba en los asuntos de interés para las potencias económicas de larga data, bajo la égida de Estados Unidos y Europa, la diversidad de una veintena de países repartidos por todo el planeta obliga a sus encuentros a enfocarse en cuestiones variadas, con un consenso más multilateral.

Ejerciendo la presidencia del G-20 durante 2023, la India del primer ministro Narendra Modi puso en agenda decisiones clave que impactarán tanto su propio desarrollo interno, como el panorama internacional en su conjunto; un chance de abogar por políticas y soluciones concretas para desafíos como la transformación digital y el desarrollo sustentable.

La influencia ejercida en estos foros internacionales tiene un impacto duradero en la política económica, la cooperación global y la diplomacia internacional de los países que la asumen. Como presidente del grupo, la India ha tenido la responsabilidad y la oportunidad de ser un agente de cambio único en el escenario mundial.

En las últimas semanas de su liderazgo al frente del G-20, Nueva Delhi auspició del 12 al 14 de octubre la primera Cumbre de Líderes Parlamentarios, el denominado P-20, como “una confluencia única de varias prácticas parlamentarias de todo el mundo” según publicó Modi en su cuenta en X.

“No puede haber mejor medio que la participación pública para hacer frente a los desafíos del mundo. Siempre he creído que los gobiernos se forman por mayoría, pero el país se gobierna por consenso. Nuestros Parlamentos y este Foro del P20 también pueden fortalecer este sentimiento. Nuestros esfuerzos por hacer de este mundo un lugar mejor a través del debate y las deliberaciones, definitivamente tendrán éxito”, dijo el premier de la India en la inauguración de la Cumbre.

Este tipo de encuentro fue uno de los más de 200 eventos sectoriales realizados en 2023 por la India, para dinamizar su presidencia del G-20. Como el segundo país más poblado del mundo y una economía emergente a toda máquina, la India recibe menos prensa que su vecino China, aunque realiza los mismos esfuerzos que el resto de las potencias emergentes para sobresalir en el escenario global.

Por esa razón, durante el P-20 se enfocaron una vez más en cuestiones prioritarias para naciones con sus inquietudes: la aceleración de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, la economía digital inclusiva, la seguridad alimentaria y la transición energética hacia fuentes renovables, en un entorno de multilateralismo reforzado.

En esa dirección, la India busca consolidar su posición como una voz influyente en los asuntos globales. Esto no solo refuerza su imagen como un actor responsable en la arena internacional, sino que también consolida su influencia en la diplomacia y la toma de decisiones a escala planetaria.

En 2023, la presidencia del G-20 le permitió a la India defender su perspectiva y promover soluciones a problemas apremiantes, como el cambio climático, la pobreza y la cooperación económica, lo que, a su vez, contribuye a su ascenso como una potencia de relevancia mundial.

Resumiendo su noción de multilateralismo con la frase sánscrita Vasudhaiva Kutumbakam (el mundo es una familia), la India asumió la batuta del G-20 con el propósito de brindar perspectivas que consideró únicas al debate internacional. El momento coincidió con el primer año de su Amritkaal, el período de un cuarto de siglo antes del centenario de su independencia, en 2047.