//

miércoles, 4 de diciembre de 2024

Aquí

Allá quienes intenten explicarnos con encuestas, quienes busquen entendernos con la confección de gráficos a raíz de todos los que dicen “sí”, de todos los que dicen “no”, de todos los que dicen estar a favor, de todos los que dicen ir en contra

Mario Ernesto Almeida Bacallao
en Exclusivo 27/11/2022
0 comentarios
Colibrí
Colibrí (Pedro Pablo Chaviano Hernández / Cubahora)

Allá quienes se crean que vamos por ahí saturados de certezas y limpios de cualquier duda. Allá quienes piensen que la duda nos inmoviliza. Allá quienes intenten hacer ver como podrido el privilegio y el calvario de tenerla, de esgrimirla, compartirla, utilizarla…

Allá quienes agredan: “¿Si tenía tantas dudas, entonces qué hacía allí?”. Allá quienes nos quieran fuera. Allá quienes nos acusen de disfrutar el manejo de la fusta y no adviertan el compromiso y el dolor con que asestamos el golpe. No practicamos el sadismo del arte del verdugo y sin embargo, mire usted, entendemos la necesidad del hacha. Allá quienes pretendan engendrar futuros sin que a nadie le duela. Allá quienes no acepten que el futuro, pretenderlo, hacerlo, desearlo, es un acto de dolor y goce, es un acto de certeza y duda.

Allá quienes intenten explicarnos con encuestas, quienes busquen entendernos con la confección de gráficos a raíz de todos los que dicen “sí”, de todos los que dicen “no”, de todos los que dicen estar a favor, de todos los que dicen ir en contra. Allá quienes no intuyan el carácter borroso y contradictorio, complejo, de los afluentes que nos llenan y mueven. Allá quienes nos simplifiquen.

Allá quienes nos declaren en la muerte insalvable de la bancarrota. Allá quienes mientan hablando de victorias dadas, definitivas, prometidas, seguras… Allá quienes nieguen lo que lleva de incierto y de determinante el acto de la lucha. Allá quienes añoren y exijan las bondades del destino sin arriesgarse a las suertes fangosas o áridas del trayecto.

Allá quienes censuren con mano nerviosa el parlamento y allá quienes no entiendan por qué ha tenido y tendrá que hacerse en la humedad y el temblor de la trinchera. Allá quien no soporte que le apunten.

Allá quien tenga miedo y allá quien no lo tenga.

Allá quien se deje utilizar para lo que no quiere que lo utilicen. Allá quien no quiera ser utilizado. Allá quien decida no ser útil.

Allá quienes ¿vivan? con el “buen gusto” de no querer ensuciarse ni los pies ni las manos ni la cara.

Aquí nos vemos.

 


Compartir

Mario Ernesto Almeida Bacallao

Periodista y profesor de la Facultad de Comunicación de la Universidad de La Habana


Deja tu comentario

Condición de protección de datos