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miércoles, 27 de noviembre de 2024

Eufemismos

Y ese momento cósmico, extraverbal, sublime... ¿cómo lo describirías?...

Mileyda Menéndez Dávila
en Exclusivo 16/05/2023
2 comentarios
Intimidades 16 de mayor
Yaíma describió su momento como volver a ser parte del cosmos: un pequeño big bang, a veces escandaloso (Jorge Sánchez Armas / Cubahora)

Lo más egoísta que puedes hacer es olvidarte de ti y de lo que necesitas, porque obligas a otros a encargarse de lo que te toca. 

Susanita, de Escríbete, lo pone en la posdata de uno de sus correos sobre copyright, y yo lo traigo como primer párrafo porque después de esa afirmación casi no hace falta leer más nada sobre el placer de masturbarse.

¡Obvio que ibas a seguir leyendo! Y lo siguiente que harás es preguntarte dónde está el eufemismo, si ya puse con todas sus letras la palabra que suelen esconder en metáforas hasta los más doctos del sexo de ambos sexos. (adrede la anfibología, el que entendió, entendió).

Pues esta crónica trata de cómo que describimos ese momento cumbre de las artes eróticas; ese brevísimo final que suele ser el principio de una vida mejor... al menos por las siguientes 12 horas.

Orgasmo, sí. Hablo de orgasmo. Mejor si es autoprovocado, o guiado sabiamente para que te lo fabrique alguien sin perderse en el proceso. Pero si aún no sabes de qué vamos escríbeme al 52164148 y pasamos directo a la consejería sobre salud sexual. (Subrayo consejería, ¿okey?).

Pero ¿qué es un orgasmo? ¿Cómo lo describirías en la tele, por ejemplo, sin que la audiencia se escandalice o corra a probar tu dicho, dejándote congelada en la pantalla?

Aunque parece simple, no lo es (lograrlo tampoco, a veces). Por eso la gente acude hace siglos a muchísimos rodeos para referirse al suceso, en muy buenos o muy malos términos, como la petit morte de los franceses o la promesa de cambiarle de orden los planetas a cualquiera, escrita espontáneamente hace dos domingos por Ñañita en el wasapeo de Senti2. 

Hace unos años empecé una lista con frases sobre el tema que leía o escuchaba por ahí, incluso en la cama (cuando leía en la cama), y me fascinó la capacidad humana de dar vueltas sin caer en el punto (para decirlo de forma que también describa ciertos retos reales del proceso). 

Según mis cálculos, todos los orgasmos de tu existencia juntos apenas cubren el uno por ciento de tu tiempo vital (con suerte) y sin embargo ocupan un 50 por ciento de tus fantasías y pesares. Y sí, en hombres jóvenes puede que parezca más, pero igual hay mucho de deporte, vehículos, salario y comida en esos sueños... y en cuanto a la práctica, mientras más seguido lo hacen, menos les dura cada uno (pobrecitos). 

Pedí ayuda en el grupo para actualizar la lista, aprovechando que andaban medio alborotados con lo del Día Internacional de la Masturbación (fue el 7, pero si no te enteraste pontepaeso ahora mismito y recupera calendario).

A mi pedido, Yaíma describ su momento como volver a ser parte del cosmos: un pequeño big ban, a veces escandaloso.  Para Alain es como tocar el cielo y Rodin le dice el Enigmático. Chema lo llamó paraíso del rey o la reina, y yo traté de no imaginarme a ninguno de los europeos (lo juro).

O sea: puro eufemismos, porque sin la libertad de usar sonidos onomatopéyicos, dilatar pupilas y enderezar la columna con nerviosismo, no puedes describir algo que cae en el 80 por ciento de la comunicación extraverbal, patrimonio común de todo lo vivo en este universo.

¿Que no he dicho cómo yo lo describo? Ni lo haré. Al menos mientras el blog no tenga emojis o mensajería sináptica, porque es algo que no logro atrapar en una sola frase. En especial si es un orgasmo tántrico.

¿Que si me lo preguntan en las peñas, charlas y talleres presenciales? ¡Uf, muchísimo! Y para esos casos tengo dos salidas, según el contexto, la edad y mis sospechas de intención de quien suelta la interrogante.

La primera es para los muy jóvenes o los muy malosos: les digo que esperen a probarlo y no necesitarán palabras. La segunda es para adultos nobles, curiosos y serios (como el profe Lemagnie y los muchachos del Proyecto Delta), y para auditorios que miran con cara de “¿Qué hace esta temba hablando de sexo?”.

En esos casos engolo la voz, pongo calor en la mirada y respondo con una sonrisa: “¿Qué es un orgasmo...? Ahora mismo me es más fácil provocártelo que describirtelo. ¿Qué prefieres?”.


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Mileyda Menéndez Dávila

Fiel defensora del sexo con sentido...

Se han publicado 2 comentarios


Susy
 19/5/23 15:24

Como puedo entrar al grupo ?????

LiaVida 🎁
 17/5/23 3:06

Jajajajajajajajaja pero que buena crónica al mayor y más corto de los placeres!!! Cuánta realidad y que pena me perdí de ese instante de debate en el grupo, uno de esos tantos momentos de aprender mientras nos divertimos, y que bueno se hable de este punto que aún es tabú lastimosamente para los ignorastes de el autoconocimiento y amor propio.

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