Covid-19 y cómo compensar la falta de luz solar en la cuarentena

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), para mantenernos en forma es suficiente si nos da el sol en brazos y cara durante 10-15 minutos al menos 3 veces a la semana, sobre todo en verano y primavera.

Pero la Covid-19 nos mantiene en cuarentena dentro de nuestras casas, y eso disminuye ostensiblemente nuestra exposición habitual a los rayos solares. Y las personas más afectadas serían quienes viven en casas interiores, sin balcones o terrazas y sin una azotea accesible. Y aunque eso pudiera afectar la salud, como todo tiene solución, existen alternativas para mejorar, por lo menos parcialmente, la falta de contacto con el astro rey.

Aunque la luz del sol es fundamental para la vida en la Tierra, nosotros los humanos, a diferencia de otros seres vivos, somos lo que se llama homeotérmicos, o sea, que para regular y mantener nuestra temperatura utilizamos nuestra principal fuente de calor, que es nuestro metabolismo y desde ese punto de vista no dependemos de la luz solar.

PERO EL SOL SÍ ES NECESARIO

Pero, cuidado, porque si necesitamos el sol para la síntesis de vitamina D, muy importante para la mineralización de nuestros huesos, entre otras funciones. Esa bienhechora luz también influye en la calidad del sueño y la salud mental, y existen indicios de que ejerce determinada influencia en la memoria y el aprendizaje. Como es esencial para que nuestro cuerpo produzca melatonina, conocida como la hormona del sueño, la cuarentena puede alterar los ritmos circadianos que controlan el ciclo de sueño y vigilia donde, como ya vimos, la luz natural juega un papel fundamental.

Por eso también se aconseja mantener una correcta disciplina de sueño, observando una rutina similar a la de nuestra normalidad diaria y levantarnos y acostarnos a las horas habituales, sin caer en la tentación, derivada de la abulia, el desánimo o la depresión, de ampliar o modificar las horas de sueño por trasnochar pegados a las pantallas, pues al modificarse nuestro ritmo habitual afectaría aún más a nuestro estado de ánimo.

LAS FUNCIONES DE LA VITAMINA D

La vitamina D tiene varias funciones, y entre ellas se encuentran regular el metabolismo del calcio, esencial para la salud de los huesos, la regulación del sistema defensivo del cuerpo y colaborar en el control de la presión arterial y el correcto funcionamiento de las arterias; la deficiencia prolongada de vitamina D puede afectar a estas funciones.

OTRAS AFECTACIONES SIMULTÁNEAS

Otros efectos negativos de la cuarentena es la salud mental, entre otras cosas por los efectos negativos de los niveles de serotonina, cuya producción depende de la luz solar, y actúa en diferentes partes del cuerpo y como un neurotransmisor en el cerebro, o sea, unidades de comunicación captadas por las neuronas para influir unas en otras propiciando dinámicas de activación en el cerebro con efectos encadenados. También participa en el deseo sexual, la temperatura corporal, los estados de ánimo, la regulación de la digestión y el apetito, así como en los estados de sueño junto a la melatonina.

La disminución de los niveles de serotonina debido a la menor exposición a la luz solar podría propiciar un estado depresivo, sumado a las situaciones de ansiedad, de temor a la virosis e incertidumbre debido a la pandemia.

Un aumento de la depresión puede presentarse en forma de cansancio aunque se duerma más, irritabilidad, pérdida del apetito, mayor deseo de consumir alimentos ricos en grasas, azúcar o alimentos refinados, apatía, tristeza, dificultad de concentración, tendencia a la soledad y al aislamiento, perturbaciones emocionales y disminución o falta total del deseo sexual y, como es lógico, el empeoramiento de procesos depresivos previos.

ALGUNAS PERSONAS APROVECHAN LA CUARENTENA

Pensando en la posibilidad de la benéfica influencia de la luz solar sobre el aprendizaje y la memoria, los más avispados no necesitan esperar mucho en esta cuarentena; muchas personas aprovechan esas horas y teletrabajan o escriben libros, y los niños y adolescentes continúan con su escolarización a través de la televisión, pero es recomendable realizar esas tareas en las fases del día donde puedan tener un mayor contacto con la luminosidad solar.

UN BAÑO DE SOL

Pero, además es importante que las personas puedan buscar la manera de darse un baño de sol con frecuencia mientras dure esta situación de alerta y encierro casero y se deberán aprovechar todos los momentos de mayor intensidad lumínica si no resulta posible disfrutar de la luz solar directa. Por eso es necesario aprovechar los momentos del día en los que el sol llega a ventanas, balcones y a azoteas para recibirlo sin exageraciones, pues una exposición moderada bastaría para una correcta síntesis de la vitamina D.

OTRAS FUENTES DE VITAMINA D

La vitamina D se encuentra en ciertos alimentos como son los huevos, los pescados azules como la sardina, los cereales, el yogur o la leche.

También se pueden tomar las gotas de vitamina D, sobre todo en casos individuales y en grupos de riesgo, aunque antes de tomarlas es necesario consultar previamente a un médico.